NA NA NA; Capítulo 16

Llegamos a casa de Mel y de Harry, era una gran casa, si es que se podía llamar casa, más bien era una de las mansiones más grandes que había visto en toda mi vida, vale, la más grnade, tenía más de diez habitaciones y todas eran enormes, nada más entrar en la casa me encontré con un recibidos y dos escaleras grandes que se conectaban con una que llevaba a la parte superior de la casa.

En las paredes había fotos de Harry, de Mel, de Emma, de One Direction, de los familiares de ambos…

-¿Qué os parece si primero vamos a dejar vuestras cosa en las habitaciones y después ya os enseñamos la casa?-Preguntó mi amiga sonriendo.

Matt todavía llevaba a Emma en sus brazos, Harry cogió a Emma en ese momento.

-Está bien.- Le contesté.

Ella me cogió del brazo y me llevó corriendo hacia la parte de arriba, por el camino se me cayeron mis dos maletas haciendo que se chocaran con Matt y él se cayera hacia atrás chocándose con Nathan y los dos y las maletas acabaron a los pies de las escaleras.

-¡Tasha!-Chilló mi hermano.

Mel, Harry, Emma y yo nos pusimos a reír.

Nathan y Matt se levantaron del suelo poco a poco.

-Creo que me he roto la pierna-dijo mi hermano cojeando para sentarse en la escalera.

Nathan en cambio se quedó callado mientras examinaba su muñeca.

-Creo que está un poco hinchada ¿Tenéis hielo?-Preguntó después de examinarse.

Harry bajó las escaleras con Emma y se fue hacia la cocina, o eso supuse yo.

Mel y yo bajemos corriendo le miré la pierna a mi hermano mientras Mel le miraba la mano a Nathan.

-No creo que tengas nada muy malo, Matt. Solo será un esguince como mucho. Eres demasiado exagerado.- Le dije a mi hermano tocándole el tobillo.

-Puede que tu hermano esté bien, pero lo de Nathan se ve muy mal, así que deberíamos llevarlo al médico.- Dijo Mel mirándome.

-Somos unos gafes.- Les dije levantándome del suelo.-Primero conozco a Louis y arruina mi vida, después el novio de mi amiga le pone los cuernos con la novia de Louis, después las fans de Louis quieren matarme, después One Direction se separa, después me tengo que mudar a España, Louis se va a España para buscarme, después vosotros dos os caéis por las escaleras. Mi día cada día va de mal en peor, sería genial que todo fuera como antes.

-¿Antes de conocer a Harry?-Preguntó Mel.

-Sí, nos han destrozado la vida.- Contesté a Mel mientras ella miraba el suelo.

-Puede que a ti sí, pero Harry es lo mejor que me ha pasado en mi vida, si no fuera por One Direction yo…

-Todavía saldrías con Adam.- La corté.

Ella volvió a mirar el suelo y se fue de allí.

-Gracias a One Direction tienes cosas que antes no tenías.- Dijo Harry viniendo hacia las escaleras.

Me miró y se fue corriendo hacia arriba dejando el hielo en el suelo. Emma estaba en sus brazos, ella me miraba desde el hombro de Harry, me sonrió, Emma, no Harry. Dejándome ver el daño que le había hecho a su madre.

-Voy a llamar al doctor que antes siempre venía a casa, debo de tener su móvil por alguna parte, aré que venga y nos mire, tú ves a hablar con Mel y con Harry, te has pasado un poquito.- Dijo mi hermano cogiendo su móvil.

Le hice caso y subí corriendo a ver a mi mejor amiga. Sabía que me había pasado, no era culpa de ellos, realmente era mi culpa, yo era la fanática loca que estaba enamorada de Louis, yo era quien había querido salir con Louis, era mi problema, no el de los demás chicos de la banda, ni de Mel, era el problema de Louis y el mío, no de los demás.

No sabía cuál de las habitaciones era la de Mel y la de Harry, ni si quiera sabía cuál de las habitaciones era, solo sabía que habían subido los tres.

Abrí como unas cinco puertas antes de entrar en la habitación donde se encontraban, Mel y Harry se giraron cuando abrí la puerta.

-Vengo en son de paz.- Les dije con una débil sonrisa en mis labios.

-Pasa.- Dijo mi amiga.

Harry se levantó de la cama en la que estaban sentados.

-Yo mejor me voy.- Dijo él.

-No, quédate.- Le dije.

Cerré la puerta y me senté en la cama con Harry, Mel y Emma. No sabía con quien disculparme antes, pero supuse que sería mejor disculparme con los dos a la vez.

-Lo siento, soy una completa idiota. Esto no es culpa de nadie, conocer a One Direction ha sido lo mejor que me ha pasado en mi vida, aunque eso haya significado que mis padres se hayan ido de Londres, aunque eso haya significado que me quisieran matar y que me odiaran. Lo de Adam no fue culpa de One Direction, fue su culpa y la de Eleanor, ninguno de los dos debería haber hecho eso sin pensar en las consecuencias. La única persona que tiene la culpa de que todo esto haya pasado es mía. Soy yo quien se acercó a Louis, soy yo quien quise salir con él, fui yo la que dejé que las fans me pisotearan, todo es culpa mía. Lo siento de verdad, yo… yo no sé porqué dije eso, me encantáis, sois todos como una segunda familia, tan importante como la primera. – Mis ojos se llenaron de lágrimas y se me quebró la voz.

Harry me abrazó y yo hundí mi cabeza en su pecho.

-Lo siento.- Volví a decir llorando.

-No es culpa tuya, nadie tiene la culpa de los desastres del mundo.- Dijo Harry.

Levanté la cabeza y miré a Harry a los ojos. Él me sonrió, miremos los dos a Mel que también estaba llorando.

-Soy una mujer débil, sabes que lloro si tú lloras.- Me dijo.

Abracé a Mel fuertemente, casi aplastando a Emma que estaba en los brazos de su madre.

-Dejad de llorar, si no yo también voy a llorar.- Dijo Harry con pucheros.

Mel, Emma y yo nos pusimos a reír.

-Ya basta, deberíamos dejar de llorar.- Dijo Mel.

Sonreí.

Fuimos abajo a buscar mis cosas, las de Matt y Nathan, las subimos arriba Harry y yo.

Entré en mi habitación, era una gran habitación, las paredes estaban pintadas de rosa pálido, en medio una gran cama blanca. Había dos puertas más, una daba al lavabo y la otra a mi armario. Mis ojos se posaron en una foto gigante que había de Mel y de mi, estábamos las dos sonriendo y teníamos cinco años.

Cuando fui al comedor, en la primera planta dela casa, el médico ya había venido, era nuestro médico desde que mis padres se casaron.

-Buenos días señor Norton.- Le dijo al médico al entrar.

-Será buenas tardes Tasha.- Dijo él dándome una enorme sonrisa. Se giró de nuevo hacia mi hermano.- Solamente tienes un pequeño esguince, en cuanto a ti Nathan creo que deberemos ponerte una escayola en el brazo, está roto, deberás llevarla durante un mes. Será mejor que prepare la escayola. ¿Dónde hay un lavabo?

Harry le acompañó al lavabo al señor Norton.

Al cabo de media hora el doctor Norton se fue, pero volvería en una semana para quitarle la venda a mi hermano y para ver como iba.

Al día siguiente decidimos ir a ver universidades porque Nathan, Mel y yo queríamos seguir estudiando. También habíamos de ir a ver institutos ya que Matt tenía que acabar la preparatoria, este sería su último año allí y después estudiaría en la universidad, quería estudiar medicina. Nos pasamos toda la mañana viendo las universidades, tengo que admitir que ninguna me gustaba. Los institutos de preparatoria estaban bien pero eran demasiado caros. En toda la mañana no habíamos comido nada ya que salimos pronto de casa para poder llegar a tiempo antes de que las universidades empezaran las clases. Entramos en un bar para comer ya que nos moríamos de hambre.

-Vamos a pedir rápido la comida, que me voy a morir de hambre- dijo Mel mientras se sentaba en una de las mesas sin preguntar si estaba ocupada , nos sentamos , Nathan a mi lado y Matt al lado de Melody. En el bar había mucha gente, me fije en una mesa donde había cinco chicas que llevaban camisetas personalizadas de One Direction, nos miraron y una de ellas se levantó y vino hacia nosotros.

-Perdonad, pero.... ¿Sois Tasha y Mel?-Dijo la chica.

Era una chica morena con los ojos claros, era de piel morena y no era muy alta.

Mel y yo nos miremos.

-Sí.- Dijo Mel.

-Sois mis ídolas, me encantáis, siempre os he apoyado- Dijo la chica.

Mel y yo volvimos a mirarnos.

-¿Podéis darme un autógrafo?-Dijo la chica sacando una libreta y un bolígrafo.

-Claro.- Dijo Mel sonriendo.

Ya era la segunda vez que me pasaba y era tan extraña como la primera, era difícil el pensar que una persona pensaba que yo era como una estrella, que me apoyaba y todo eso. Era demasiado extraño, no sabía ni que decirle a la chica. Yo no era una ídola como decía ella, si no más bien, alguien que tiene muchos ídolos.

Al finalizar el día me fui a mi habitación con Emma en mis brazos, no paraba de llorar, su madre se había ido a hacerle el biberón.

-¿No deja de llorar?-Me preguntó Harry.

Se sentó a mi lado en la cama.

-LA verdad es que no, y no sé que hacerle para que deje de llorar, le he hecho cosquillas, la he lanzado al aire...-Le conté a Harry.

-Le gusta que le canten.- Dijo él empezando a cantar una nana popular de Inglaterra.

Supe que me había quedado dormida al despertarme el día siguiente tapada con una manta rosa, que no sabía de dónde había salido.

Bajé abajo, no había nadie, supuse que estarían todos durmiendo, pero entonces vi la hora, las doce del mediodía, no sabía donde se habían metido.

-Buenos días dormilona.- Dijo Harry.

Su pelo rizado estaba totalmente despeinado, se pasó las manos por el pelo, como hacía él siempre. Primero se lo sacudía y después se lo peinaba.

-¿Dónde están todos?-Pregunté.

-Mel tuvo que ir al juzgado por lo de la custodia de Emma, no nos deja ir, me dijo que si me veía por allí me mataría y lo mismo contigo, así que nos ha dejado solos.- Me informó Harry.

-¿Era hoy?-Pregunté con los ojos bien abiertos.

-Eso parece, yo tampoco lo sabía, ni si quiera me ha despertado, lo tenía bien guardado el secreto, pero me he despertado y tu hermano me lo ha dicho, entonces ella se ha enfadado con Matt diciéndole que no se metiera en sus cosas y he hecho que Matt y Nathan vayan por mi, no quiero que esté a solas con el idiota de Adam.

-Alguien tenía que quedarse a cuidar a Emma.- Dije cogiendo una tostada del armario.

-Se han llevado a Emma.- Dijo Harry.

Él se sentó en una de las sillas, me senté enfrente de él.

-¿Cómo va Other Direction?-Le pregunté después de morder mi tostada.

-SI te digo la verdad, muy mal, no se venden discos y mañana tenemos que irnos de gira y todavía hay entradas que no se han vendido, creo que el grupo se va a separar, Niall ya ha estado buscando universidades por aquí cerca y a Zayn le han llamado para hacer de modelo en bastantes sitios, así que tal vez nos acabemos de separar, sin Louis no es lo mismo.- Dijo él mirando mi tostada.

-Lo siento, si Louis no me hubiera conocido entonces...

-Entonces yo no conocería ni a Mel ni tendría a Emma, son las dos chicas más importantes de mi vida, a parte de mi familia, ellas son mi familia, las quiero más que cualquier cosa. Si no hubieras aparecido yo no las hubiera conocido, puede que One Direction siguiera unido, pero nos habríamos separado, si no es por una cosa, es por otra. No es tu culpa.- Me contó Harry.

-Sí, sí que lo es, si yo no hubiera ido a Mel... Mel podría haber ido sola y entonces nosotras dos podríamos volver a ser las de siempre y vosotros seríais los de siempre.- Contesté.

-Pero yo no quiero ser el de antes.- Dijo él mirándome a los ojos.- ¿Tú si?

Recordé mi vida, era una vida tranquila, tenía a Mel y a Tom, habían sido mis dos mejores amigos, pero ahora Tom ya no, casi no nos hablábamos desde que se había enterado de que Mel se había quedado embarazada de Adam, a mi también me entraron ganas de no volver a hablarle, nunca me había gustado Adam, había sido el chico más guapo de todo el instituto y desde luego, siempre había sido perfecto, pero no me gustaba como trataba a la gente. Echaba de menos ser la inocente Tasha, a la que nunca le pasaban cosas malas, pero a la vez ahora vivía con Harry Styles y tenía una muy buena relación con él.

-En parte.- Confesé.- Quiero mi vida tranquila, quiero que la gente no se fije en mi, pero a la vez quiero esto, me llevo bien contigo y le haces muy feliz a Mel. Me gustaría una mezcla de las dos.

EL teléfono de Harry sonó. Él miró la pantalla.

-Tengo que cogerlo.- Dijo él yéndose de la habitación.

Cuando volvió estaba pálido y en sus ojos habían lágrimas, me asustó, y mucho. Me levanté corriendo de la cama y le abrazé.

-El grupo se separa, la gente ha devuelto las entradas, no tenemos éxito. Me acaban de decir que tanto One Direction como Other Direction no existe.- Dijo Harry llorando en mis hombros.